La prevención de riesgos laborales en el Servicio de Atención Domiciliaria
27 marzo, 2019Manifiesto para detener el maltrato a las personas mayores
4 abril, 2019El 15 de febrero se constituyó el Comité Asistencial Ético de Accent Social con la voluntad de solucionar la aparición de dilemas éticos en el ámbito de los servicios sociales. Es decir, la consideración de la persona usuaria en poder ejercer autonomía en las decisiones que le interesen y afecten.
El Comité Asistencial Ético de Accent Social se crea para ser un comité participativo y consultivo, cuya finalidad es la de ayudar a analizar los problemas éticos, que pueden consultar las personas usuarias, familiares y profesionales de Accent Social. El objetivo es ayudar al personal a tomar decisiones, cuando éstas planteen cuestiones éticas.
Nos hablan sobre ello Quico Manyos de la empresa Dignetik; Cristian Palazzi, experto en bioética; y Sonia Ibañez de Accent Social, miembros del actual Comité.
ÉTICA CON ACENTO (SONIA IBÁÑEZ)
Accent Social nació con el espíritu de acompañar a las personas durante su proyecto vital y lo hace desde el respeto y la dignidad de todas ellas. Sobre todo, creyendo en aquello que hacemos cada día, cuanto a cuidar de todo lo que es Accent Social: las personas.
Esta mirada sobre los cuidados no se puede hacer sin la ética aplicada al trato. Como decía Carol Gillian, el mayor grado de desarrollo moral y ético se encuentra en el equilibrio entre el cuidado de uno mismo y el cuidado de las personas de su entorno. Por este motivo, se hace necesario crear espacios para que el equipo de profesionales pueda reflexionar y encontrar el apoyo necesario.
Nuestros valores y nuestras personas son nuestro verdadero proyecto y hay un compromiso firme hacia todas ellas. Este compromiso lo reflejamos ahora con la constitución de nuestro Comité de Ética CAEAS (Comité Asistencial Ético Accent Social). Cristian Palazzi es el Presidente, una pieza clave para analizar y mejorar aspectos de Accent Social, con un potencial infinito.
Este proceso de aprendizaje en la creación del Comité lo hemos hecho de la mano de Dignetik y el equipo de profesionales, que culminó el pasado 15 de febrero con su constitución.
Nos ilusiona esta nueva etapa donde se impulsa aún más el poner palabra y hechos a lo que en la práctica cotidiana nos hará mejorar, aprender reforzando nuestros valores y nuestro compromiso con las personas.
Sònia Ibañez, Responsable de Innovación de Accent Social.
LOS DILEMAS NOS LLAMAN A LA PUERTA (QUICO MANYOS)
A menudo se plantea la ética como un tema filosófico, centrado generalmente en el ámbito médico desde la perspectiva de la bioética. Nada más lejos de la realidad. La ética y la reflexión sobre nuestras formas de actuar ante situaciones de la vida diaria se dan cada día en una residencia o en un centro de día, en la atención a personas sin hogar, o al entrar en un domicilio. Los dilemas llaman a la puerta de forma constante y nos hacen dudar ante situaciones tan cercanas que nos piden una reflexión sobre cómo favorecer la máxima dignidad de la persona.
En nuestro trabajo diario, en la cotidianidad de un centro residencial o UN servicio de atención a la dependencia aparecen numerosas situaciones que nos generan dilemas sobre cuál es la forma correcta de actuar: una persona que no quiere comer triturados, a pesar de saber que puede atragantarse; hacer uso o no de medidas de sujeción; realizar una cura obstinada en los momentos del final de vida; dar más valor a la decisión de los hijos que a la de la persona mayor; situaciones de incapacitación, gestión de la información, internamientos involuntarios, situaciones de sospecha de maltrato …
Nuestro día a día está lleno de situaciones en la que debatimos si nuestra actuación es correcta o no lo es. La ética de la vida cotidiana se vive más intensamente en nuestros centros y servicios, ya que estamos afrontando los retos éticos de la intimidad, de la gestión de las decisiones, los aspectos sanitarios, de forma continuada, permanente en el tiempo de vida de la persona.
Con el Comité de Ética y los espacios podremos hacer posible que sus espacios sean SU LUGAR DE VIDA. La reflexión ética nos permitirá desarrollar nuestros valores y formas de actuar a partir de un sentido humanizador y centrado en la persona. Las dimensiones de la ética asistencial nos acercan a la definición de formas de actuar que potencian la ética de la persona atendida, sus valores personales, su identidad, su autonomía moral si todavía la tiene intacta o la gestión de sus momentos de felicidad e infelicidad que se dan en la vida cotidiana. ¡Vamos!!!!!
Quico Manyos. Director de contenidos de Dignetik
POR QUÉ ES IMPORTANTE UN COMITÉ DE BIOÉTICA EN UNA ORGANIZACIÓN COMO ACCENT SOCIAL (CRISTIAN PALAZZI)
La bioética es la rama de la ética aplicada que se dedica a pensar la complejidad en contextos asistenciales y de salud. Es por ello que el nacimiento de un comité de bioética siempre es una buena noticia. En un mundo caracterizado por la inmediatez y la falta de reflexión, la apuesta por un espacio de diálogo como es un comité de bioética nos ayuda a trabajar diversos ámbitos que de otro modo se dan por supuestos, sin tener el lugar que se merecen en la organización.
Un comité nos permite pensar lo que somos y qué queremos ser. Es por eso que su principal tarea es la recomendación y el acompañamiento. Es el lugar donde la organización tiene la oportunidad de reflexionar lo que hace de manera pausada, integrando todas las miradas que intervienen en su actividad y revisando aquellas virtudes y defectos que definen su carácter.
El comité es un espacio donde todo el mundo está invitado. Y lo es porque tiene que ver con la solidez del proyecto organizativo, la madurez de los servicios que se ofrecen y el compromiso profesional con las personas que forman parte. Personas que son, al fin y al cabo, su cara visible y de quien depende, en buena parte, la salud y vitalidad de esta.
Tras varios años trabajando con diferentes comités, mi experiencia me dice que, según vamos asumiendo este espacio como un espacio de reflexión y de debate, la organización crece desde dentro, potenciando su desarrollo en varios niveles: personal, profesional, organizativo y social.
Así pues, ¿qué podemos esperar de un comité? Básicamente, un lugar de encuentro donde las personas que forman parte del universo de la organización encuentran un apoyo activo, sumando los esfuerzos necesarios para que su trabajo pueda seguir evolucionando de una manera humanista y centrada en la persona.
Y es precisamente porque la cosa va de valores y de debates sinceros, que la ética no es algo que se pueda imponer, ni nada que salga de manera automática. La ética la debemos vivir si queremos ver sus resultados. Así que, es en nuestras manos convertir esta nueva herramienta en una herramienta viva, que nos sirva para trabajar durante nuestro día a día y vislumbrar qué queremos ser en el futuro.
Cristian Palazzi, experto en bioética y derecho y presidente del Comité